Ángel Olaran es mostra optimista i continua sense perdre l’esperança
El missioner Ángel Olaran es mostra optimista i continua sense perdre l’esperança en el darrer escrit d’aquest juliol. El pare Olaran explica les dificultats que encara tenen a Wukro, Tigray, però pensa sempre en positiu i en l’oportunitat que aviat la situació sigui millor.
Escrit d’Ángel Olaran
Hoy hace un año que los tigriños entraron en Makelle, desalojando al partido del Primer Ministro etíope – Prosperity Party (PP).
Después de un buen número de encuentros de nuestras instituciones madre internacionales (el pare Olaran es refereix a l’ONU, UA, UE. . .) con el gobierno de Addis Abeba, da la impresión de que ni siquiera ellos han visto la necesidad de exigir que el trato oficial a los tigriños no sea el que siguen recibiendo, por orden del parlamento etíope, de criminales y terroristas, gobernados por la junta.
Durante este tiempo, raras han sido las personalidades con poder alguno, que han visitado nuestra región (Tigray). A fecha de hoy, todo tipo de fronteras físicas, monetarias, sanitarias, alimentarias, por aire y tierra siguen cerradas, excepto los dos viajes aéreos semanales permitidos a la ONU con el permiso de que en cada viaje puedan enviarnos a las misiones hasta 3 millones de birrs (uns 55.000 € aproximadament), según nos van llegando a Addis Abeba.
Envío de dinero y la ONU no tiene combustible para esos dos aviones pacíficos
Pero aún seguimos con serios problemas para recibir las transferencias que pudierais enviarnos a bancos fuera del Tigray. Solo el Secretariado Católico de Addis tiene autoridad para hacernos llegar ese dinero en metálico, en la moneda etíope, con aviones de la ONU -dos viajes aéreos semanales comentados en el párrafo anterior-, que de hecho son los únicos que entran en Tigray.
El gobierno tiene estipulado un máximo que anda por unos 80.000 € semanales – en nuestro caso que es para todas las instituciones religiosas del Tigray, así como para las diócesis. . . De la transferencia de 21.500 € (1€ – 55 birrs) que se nos envió de ahí hace ya varias semanas, hace ya 17 días que en uno de esos viajes aéreos eran de enviarnos medio millón de birrs para nuestra misión en Wukro que, al final, quedaron en 150.000, con la promesa de que los restantes, hasta el medio millón, nos llegarían la semana siguiente. Al llegar ese día al aeropuerto de Makelle, se encontraron con que en Tigray no había suficiente combustible para su vuelta a Addis Abeba y, hoy, 3 de julio, el avión continúa en Makelle. Seguimos sin recibir dinero alguno y la ONU sin poder mover su personal.
Los 150.000 birrs nos los trajo una religiosa nigeriana, con un pase válido para 10 días de estancia en Tigray. De resultas, también ella se encuentra en Makelle. A los 3 días de conocerse el estado del aeropuerto, comenzaron a gestionar, en Addis Abeba, el permiso para que el personal pudiera viajar en dos coches a Semera, la capital de Afar – y de allí conseguir un avión a Addis. Aún siguen en Tigray esperando la llegada del permiso.
En resumen, el 17 de junio nos llegaron 150.000 birrs y la próxima semana nos llegarán los otros 350.000. Lo que nos exige volver a hacer un listado nuevo de gastos, especialmente sueldos de empleados, huérfanos, ancianos. . . por 150.000 birrs para esta semana y otro de 350.000 para el envío de la próxima semana. Y aún nos queda el resto hasta los 21.500 € (1 € – 55 birrs). Espero que algo de esa ayuda pueda llegarnos a casa.
Acostumbrados estos últimos meses, a ver a la ONU con tanta energía, tan resoluta en decisiones que bien pudieran generar una tercera guerra mundial, uno se pregunta ¿cómo es que no tenga autoridad, ante una autoridad local, con más pena que gloria, para conseguirse esos litros de combustible para sus viajes pacíficos? De llorar ante esa impotencia.
Y aprovechando que hemos llegado a Semera, mencionar que unos 12.000 tigriños se encuentran confinados en un campo, a falta de lo más mínimo. Se habla de muertos, de mujeres embarazadas en estado grave. Dudo que la ONU y colaterales se hayan enterado de ello.
Encuentros protocolarios entre Addis Abeba y nuestras instituciones madre
Volviendo a la escasez de visitas oficiales a Tigray, es digno de mencionar la visita recibida la semana pasada, de una comisión de 16 representantes de la EU, al Ayder, hospital de referencia de Makelle. Debieron de quedar muy impresionados de la mala condición de los servicios que los pacientes puedan recibir – que no es poco.
En una cadena televisiva etíope extranjera, en una entrevista a políticos extranjeros – siento no poder ofrecer más detalles – a lo largo de la conversación quedó claro que no procedía que Tigray exigiera un referéndum como condición previa para negociar la paz con Addis Abeba, basado en que si ellos lo consiguen otras regiones lo solicitarán y será el fin de Etiopía. Hay un principio moral (Deter, en inglés – ¿deterren en castellano?) que mantiene que a nadie se le puede castigar para que sirva de escarmiento a otros – solo se castiga a alguien por su propia culpa – no puede responder de posibles culpas de otros. A Eritrea se le concedió un referéndum y la independencia hace 30 años, y todo sigue igual – sin la menor duda, esa no es la razón por la que Tigray exige el suyo.
Uno se pregunta qué contacto han podido tener esos políticos, y muchos más, con Etiopía, Tigray estos últimos años en los que el “muelle” ha sido tirado al máximo por ambos lados y ahora que se ha roto exigen que ignoremos el desastre.
Durante los últimos 18 meses han ido sucediéndose encuentros entre Addis Abeba y nuestras instituciones madre: ONU, UA, UE. . . que no han pasado de amenazas que nunca se han cumplido. Esas instituciones madre, defienden la Soberanía Nacional de Etiopía, aceptando a su vez, el no poder negociar con criminales y terroristas. Con todo, últimamente, en sus “recetas de visita médica” pedían que las partes en litigio se sentaran a negociar y eso a pesar de que Tigray sigue, hoy en día, siendo dominada por una junta, no por un gobierno, a la vez que el PM etíope de siempre se ha negado a negociar con terroristas – así por él nombrados. Si ahora el Primer Ministro etíope está dispuesto a negociar, habiendo desoído tantas recomendaciones internacionales, uno debe preguntarse por la razón que le mueve a ello – ¿tendrá algo que ver con la actual situación caótica del país, necesitando emplear su energía militar en otras regiones?
Vergonzosamente, nuestros mayores han pasado de Tigray desde el comienzo de la guerra, incluso ahora de Etiopía – en un estado de crisis total durante los últimos 8 meses.
Ante el fracaso de tanto encuentro protocolario, fallido de antemano, la crisis ha ido aumentando, dándonos ellos la espalda. Ha habido escenas de mujeres tigriñas, delante de varios familiares, a veces hasta 5, asesinados sin más, susurrando entre sollozos “¿cómo vamos a ser uno con ellos?”
Estos días me comentaba Abba Samuel, que un sobrino suyo de unos 20 años, inscrito, como tantos miles más, en el ejército tigriña, se encuentra en Wukro con su batallón. Estaba siguiendo un curso de un mes en electricidad de vehículos de transporte y a los 15 días les han hecho volver: ¿Razón? ¿Motivos del joven para inscribirse en el ejército tigriño? Quizás valga este: El día Navidad del 2021, estando 12 jóvenes reunidos celebrando la festividad, en el entorno de sus casas, casi todos familiares, entre ellos – 6 eran primos de Abba Samuel, además de un par de primos segundos, había hermanos entre ellos, de los 12, 3 estaban casados. Los soldados eritreos mataron a todos ellos. En los pocos días que siguieron a este incidente, en esa zona mataron a 50 personas.
Escenas de estas se han repetido. El 16 de abril del 2021 de alguno de los despachos de la ONU, salió este escrito: “La violencia sexual del Tigray llega a un nivel de crueldad imposible de comprender”. Lo que a nosotros nos resulta más imposible de comprender es la indiferencia con la que se siguen tratando esas violaciones por nuestras instituciones madre.
Han dejado que se llegue a estos niveles de crueldad, de todo tipo de crímenes, que, solo en Tigray, han matado a más dos mil personas, añadido a ello todos los destrozos – hospitales y empresas, incluidos – robos. VIOLACIONES con la imaginación funcionando a tope. Esto crea un mal sentir. . . Y ellos, nuestros defensores, de espaldas.
Y con qué derecho ahora, supongo que, sin haber pedido perdón alguno, sin sentir el menor malestar de conciencia, con la cabeza alta ante tanta indiferencia, se oponen al referéndum que aquí se da por hecho. Me imagino que ni siquiera se pide por derecho: el sentir general de la población es que lo tenemos que hacer, y eso prima.
Alguna vez he comentado que, cuando comenzó el conflicto, el 4 de noviembre del 2020, por parte de Tigray, nada había preparado ni previsto, para algo así. Al poco tiempo se comenzó a leer en paredes: Tigray vencerá – incluido hasta en saludos. El referéndum, la independencia, el somos una nación, ha sido el último paso. Y muy último. Cuando llegué a Wukro el 11 de enero de este año 2022, aún no se mencionaba nada de eso, se seguía con el “Tigray vencerá”. Nadie se preguntaba: qué hacer con esa victoria. Incluso a estas alturas, nunca se ha maltratado la bandera nacional etíope. Alguien que lo ha visto, me han comentado que, en el despacho del Presidente de Tigray, ondean la bandera de Tigray y la de Etiopía. Ni hay animosidad contra personas de etnias no tigriña conviviendo aquí.
El Presidente de Tigray, Debretsion Gebremikael, hace ya unos meses comentó: si no nos quieren no nos podemos imponer. –––En una publicació anterior, Ángel Olaran: “Podríem dir que han fet fora a Tigray d’Etiòpia”. –––
Ayuda Humanitaria
Hace días que no se oye hablar de la llegada de camiones con comida. En una semana debieron de entrar más de dos mil. Por ahora lo que se solicita es solo comida, pero en muchos camiones incluyen mesas, sillas, platos, pucheros. . . lo que limita el volumen de comida. Hoy nuestro Haleka, ahora Abo Keshi – sacerdote – me decía emocionado: ¡hemos recibido ayuda! – en su casa son 5 personas y les han dado lo estipulado para dos para un mes: 30 kg de trigo, 6 de un cereal y un litro de aceite.
Esperamos que un día nos llegue el turno y la recibamos también nosotros en la misión. Las hermanas de la Madre Teresa nos comentaban que está aumentando el número de personas con problemas mentales, sobre todo padres que no pueden alimentar a sus hijos, al igual que suicidios, por la misma razón.
En nuestra casa aún tenemos en el almacén de casa arroz y espaguetis, a lo que podemos añadir productos de la huerta de la escuela, a cuenta – pero la escuela no puede seguir vendiendo a cuenta. Nuestra “ama de casa” ha tocado fondo; ya pocas vueltas le puede dar al tornillo. Hace una semana, los salesianos nos regalaron 50 kg de harina y podemos hacer pan – hembasha- en casa. Somos 6 comensales. Una forma de comer lechuga sin ingrediente alguno es hacer un plato combinado con arroz, acelgas y lechuga. Otra vez puede ser alubias, espaguetis, lechuga. Se puede comer la lechuga sola, sin hacerle mala cara. Los 150.000 birrs ya mencionados, están destinados al programa de huérfanos y ancianos.
Hambruna en Kenia
Hace meses que se había anunciado la hambruna producida por la sequía en Kenia, Somalia y Etiopía. Un programa de ayer noche en Al-Jazzera exponiendo la condición catastrófica de Kenia, afectando a niños, ancianos. . . a un porcentaje alto de la población, la persona responsable del programa de ayuda insistía en que se trata de recaudar fondos, exponiéndolo como una misión imposible.
Además de la sequía y la falta de fondos, está la guerra en Ucrania, una de las mayores exportadoras de trigo a África. Y aquí Rusia entra en juego. Rusia, además de impedir el tráfico del trigo, se está apoderando de trigo de Ucrania y vendiéndolo es su mercado, como producto propio. Pero por encima de todo esto aún queda la ONU, vendida a los CINCO VETOS de Consejo de Seguridad. Nos da una cierta seguridad, valga la mentira, el saber que de alguna manera se están saltando el veto de Rusia en Ucrania; pero no darán un paso respecto a la hambruna mencionada, ni sobre las injusticias que se están cometiendo en Tigray. Valiéndose de la Soberanía Nacional de Etiopía, Rusia vetó la entrada de misiones políticas exteriores a Tigray, y al respecto, ni Inglaterra, ni Francia, ni los EE.UU, con todo el ruido que están sacando en otros lugares, se han hecho oír ni sentir. Y así seguimos.
Genocidio en Tigray
Se está llevando a cabo, en todo el Tigray, casa por casa, un estudio, siguiendo normas técnicas de la ONU. Se formó un primer grupo por zonas, quienes a su vez han organizado talleres para profesionales: maestros, profesores, personal médico, ingenieros. . . quienes llevan 10 días pasando por las casas.
Os tendremos al corriente.
Un fuerte abrazo.
Ángel