La situación que nos espera es bastante catastrófica
El misionero vasco Ángel Olaran está muy preocupado porque la situación que nos espera es bastante catastrófica. Los acontecimientos que se avecinan en Etiopía debido a la severa sequía “es peor que la del 85, donde murió tanta gente”.
El Padre Olaran se lamenta de que “la cosecha de este año va a ser 0”, lo que hará que “sea una situación precaria muy fuerte. No solamente porque nos va a faltar esta comida de ahora, que es la comida de casi todo el año, sino también porque va a faltar el agua de los pozos. Va a faltar también el agua de regadío y, posiblemente también, va a faltar el agua de beber. Va a faltar la leche porque se espera que 400.000 cabezas de ganado mueran”. Y clama, porque “hay 15 millones de personas que están esperando ayuda”, lamentando muchísimo “que la hambruna severa crezca”. Olaran tiene muy claro que “este año nos ha tocado bailar con la más fea, y ésta no es la más fea, es diabólica”. “El que tenga oídos para oir que oiga”.
Sobre Àngel Pujol tiene palabras muy sinceras: “Además de dedicarse plenamente aquí, también tuvo en Wukro sus lugares de acción como niños, ancianos, huérfanos, regadío, educación, reforestación, cementación de acequias. Más en cosas relacionadas en lo que podía mejorar la calidad de vida de la gente”. Afirma, que “de alguna forma, junto con el pueblo de Wukro me encuentro orgulloso de que nuestra institución, nuestra vida en grupo haya encontrado un lugar entre las instituciones de Mollerussa. Es un honor para nosotros. Ángel nos enseño que una vida puede tener un sentido y un sentido pleno”.
Ángel Olaran explica toda la dura realidad de Etiopía
Son sus palabras durante la VIII Velada Solidaria, del pasado día 3 de octubre, dedicada a Àngel Pujol i Gorné. Estos son sus comentarios en el que destaca que «la situación que nos espera es bastante catastrófica».
Cuando el pobre te acoge, te acoge con lo que es, no con lo que tiene
Eso de que soy una persona que me doy a los demás, es que no es así. Soy una persona que vivo de los demás. El cariño, la acogida, el calor de esa gente (etíope)… eso no se compra. Yo puedo dar algo, algo material que lo recibo y que no es mío que pongo a disposición de los demás. Lo que dan ellos es porque es suyo. Si dan un vaso de agua es porque es suyo, aunque no les sobre. Vivo gracias a los demás y eso es de verdad, no es una frase hecha. Cuando el pobre te acoge, te acoge con lo que es, no con lo que tiene. Nosotros a veces acogemos con lo que tenemos y no con lo que somos y ahí está la diferencia, que es una diferencia muy grande. Yo creo que Àngel (Àngel Pujol) a su estilo se dio cuenta que Dios no nos ha hecho en serie sino que nos ha hecho en serio, que cada uno de nosotros es un mundo en sí. Creo que Àngel, de alguna forma, llegó a entender lo que dice Jesús: “Que nos amásemos los unos a los otros, no que nos amasemos”.
Me uno al homenaje que le estáis ofreciendo a Àngel Pujol
He sido afortunado también porque cuando estuve anteriormente aquí en enero para despedir a Àngel y muchos en el tanatorio me decían, y que hoy ha cobrado fuerza: “Esto continuará, esto no acaba con Àngel”. Nadie me dijo: “Se nos ha ido, ¿Qué va a ocurrir aquí?”. Yo he visto hoy aquí que esto se está realizando y una muestra es este homenaje. En el tanatorio fue un homenaje natural y espontáneo. Hoy no es un homenaje tan espontáneo, sino más trabajado, más pensado en Àngel. Es un homenaje porque Àngel ha estado involucrado en casi todas las instituciones de Mollerussa y también de fuera, ya sean deportivas, culturales o educativas. En casi todas ellas tuvo un lugar. Y este es el homenaje que le estáis ofreciendo a él. Agradecérselo a él, en nombre de su familia, y también en nombre de la fundación y esto es una prueba de ello y al que también me uno.
Àngel Pujol nos enseñó que una vida puede tener un sentido pleno
Àngel, además de dedicarse plenamente aquí, también tuvo en Wukro sus lugares de acción como niños, ancianos, huérfanos, regadío, educación, reforestación, cementación de acequias. Más en cosas relacionadas en lo que podía mejorar la calidad de vida de la gente. De alguna forma, junto con el pueblo de Wukro me encuentro orgulloso de que nuestra institución, nuestra vida en grupo haya encontrado un lugar entre las instituciones de Mollerussa. Es un honor para nosotros. No nos consideramos como un apéndice, estamos en casa con todos vosotros. Ángel ha sido el puente entre aquello y esto. Si una persona ha conseguido que todos estemos aquí, todos nosotros podemos conseguir que otros muchos estén entorno nuestro. Ángel nos enseño que una vida puede tener un sentido y un sentido pleno.
La cosecha de este año va a ser 0 y la situación va a ser muy precaria
Àngel, si estuviera aquí, me diría “Melaku toca la yaga y explica el problema que estáis teniendo ahora, este año, en Wukro”. Y es que la Corriente del Niño ha pegado fuerte en casi todo Etiopía. Ha pegado fuerte en Wukro y diría en toda la región del Tigray. Cuando salí de allí, el 16 de septiembre, los campos que tenían que estar preparados ya para la siega estaban con solo dos palmos de altura. Estaban verdes, verdes creciendo y ni siguiera llegaban a un 20% de los campos que tenían ya espigas. Había dejado de llover 4 o 5 días y apenas ha llovido más. Me imagino que la cosecha de este año va a ser 0. Comentando con los campesinos para que va a servir esto, dicen que va a ser solamente comida para el ganado, al menos la paja, el forraje. Vamos a estar en una situación precaria muy fuerte este año. No solamente porque nos va a faltar esta comida de ahora, que es la comida de casi todo el año, sino también porque va a faltar el agua de los pozos. Va a faltar también el agua de regadío y, posiblemente también, va a faltar el agua de beber. Va a faltar la leche porque se espera que 400.000 cabezas de ganado mueran. Esperamos que las estadísticas fallen. Hace falta ayuda para 15 millones de personas. Las mujeres embarazas no lo van a tener bien. Eso va a condicionar mucho los futuros nacimientos y la calidad de vida de los niños menores de 5 años porque se espera que la hambruna ya severa crezca.
Situación muy preocupante, fuera de control y catastrófica
Al menos en nuestra área hasta ahora la hambruna severa la teníamos controlada. Existía la hambruna pasiva que los niños andaban por debajo del 80% del peso, pero aún corrían. Lo que pasaba es que si tenían 4 años, representaban 2, pero vivían y podían crecer e ir a la escuela. La situación que se nos presenta ahora es bastante catastrófica y no sólo ahora en este año sino que no van a tener semillas para poder sembrar el año que viene. Esto es como la pescadilla que se muerde la cola. Este año nos ha tocado bailar con la más fea y, esta no es la más fea, esta es diabólica. No quiero desentonar el espíritu de esta noche, pero tener en cuenta que tendremos allí 15 millones de personas que de alguna forma están esperando ayuda. Esta sequía de este año es peor que la sequía del 85 donde murió tanta gente, pero lo bueno es que ya el gobierno con instituciones internacionales como la ONU, la FAO, la UNESCO,… están pidiendo ayuda para que esto se paríe. Son ayudas puntuales que no solucionan el problema del hambre, porque para solucionar el problema del hambre tendríamos que rehabilitar los torrentes, hacer que la lluvia que cae allí se quede allí, y luego podamos regar durante la sequía que son durante 10 meses y se tendrían 3 cosechas, lo que permitiría a la gente alimentarse y vender un poco de cosecha.
Y para terminar, Ángel Olaran dijo:
«El que tenga oídos para oir que oiga».
Estos fueron los comentarios de Ángel Olaran en la VIII Velada Solidaria celebrada el día 3 de octubre de 2015.